La psicoterapia infantil es un tipo de intervención terapéutica que tiene como finalidad principal potenciar el bienestar emocional y social del niño/a. Se basa en un conjunto de técnicas y métodos usados para poder ayudar a niños y niñas que tienen problemas con sus emociones o conductas. Se utiliza el juego como elemento clave en la terapia. Además, implica a la familia (y en ocasiones la escuela y/o otras instituciones y profesionales) en el proceso terapéutico, por lo que la relación terapéutica y la alianza es múltiple.
Cuando un niño sufre dificultades emocionales o psicológicas puede ser necesario la ayuda de un psicólogo o psicóloga. Algunas de las señales que pueden indicar la necesidad de terapia son:

- Bajo rendimiento escolar
- Ansiedad o depresión
- Hiperactividad
- Problemas de conducta, como rabietas, agresividad, ira en exceso, etc.
- Dificultad para conciliar el sueño
- Problemas de comunicación o interacción
- Dificultad para mantener la atención
- Conductas obsesivas y repetitivas
- Cambios en el apetito
- Timidez o problemas de relación social
- Miedo irracional
¿EN QUÉ DIFICULTADES INTERVENIMOS?
La intervención irá dirigida a que los niños superen, con la ayuda de sus padres, diferentes tipos de problemas psicológicos por medio del aprendizaje de una serie de herramientas, tanto cognitivas como conductuales, en un clima de juego y distensión.
Entre las dificultades más frecuentes con las que trabajamos, encontramos:
- Hábitos: control de esfínteres, terrores nocturnos y pesadillas, manías…
- Límites: oposicionismo, agresividad, rabietas, negatividad, dificultades de autocontrol, impulsividad…
- Emociones: miedos, preocupación ante situaciones cotidianas, obsesiones, celos, autoestima, dificultad en relaciones afectivas…